San Bernardo,
abad y doctor de la Iglesia
20 agosto
Bernardo nace en Borgoña (Francia) en el 1090, hijo de un conde. A los 21 años abandona padres, bienes, señorío, e ingresa en el monasterio del Císter; pero lleva consigo a 30 amigos que han optado, como él, por la vida monástica. Cinco años después funda el monasterio de Claraval, que en breve reúne unos 500 monjes, y de allí parten grupos para fundar monasterios en los diversos países.
Bernardo es el orador, el escritor y el árbitro del siglo. Se encara con abades, obispos, reyes y pontífices. En su ingente actividad solía decir: “Los negocios de Dios son mis negocios; nada de cuanto le atañe me es ajeno”. Frente al acoso de los filósofos respondía: “Mis maestros no son los filósofos, sino los apóstoles”. Siempre de salud frágil a causa de las austeridades y la desbordante actividad, pasa la descanso eterno en el 1153.
Escribía en sus sermones sobre el Cantar de los cantares: “”El amor basta por sí solo, satisface por sí solo y por causa de sí. Su mérito y su premio se identifican con él mismo. Amo porque amo, amo por amar. Gran cosa es el amor, con tal que recurra a su principio y origen, con tal de que vuelva siempre a su Fuente y Origen, y sea una continua emanación de la misma”.
En verdad que el amor cortado de su Fuente, Dios-Amor, se agosta y se pervierte en egoísmo camuflado de amor. Vale la pena verificar si nuestro amor es verdadero…
Hoy es el 97º Aniversario de la Familia Paulina, fundada por el Beato Santiago Alberione en el 1914, fiesta de San Bernardo.
Bernardo es el orador, el escritor y el árbitro del siglo. Se encara con abades, obispos, reyes y pontífices. En su ingente actividad solía decir: “Los negocios de Dios son mis negocios; nada de cuanto le atañe me es ajeno”. Frente al acoso de los filósofos respondía: “Mis maestros no son los filósofos, sino los apóstoles”. Siempre de salud frágil a causa de las austeridades y la desbordante actividad, pasa la descanso eterno en el 1153.
Escribía en sus sermones sobre el Cantar de los cantares: “”El amor basta por sí solo, satisface por sí solo y por causa de sí. Su mérito y su premio se identifican con él mismo. Amo porque amo, amo por amar. Gran cosa es el amor, con tal que recurra a su principio y origen, con tal de que vuelva siempre a su Fuente y Origen, y sea una continua emanación de la misma”.
En verdad que el amor cortado de su Fuente, Dios-Amor, se agosta y se pervierte en egoísmo camuflado de amor. Vale la pena verificar si nuestro amor es verdadero…
Hoy es el 97º Aniversario de la Familia Paulina, fundada por el Beato Santiago Alberione en el 1914, fiesta de San Bernardo.